A los medios: Balazos no abrazos

Martha Nava

A los medios: Balazos no abrazos

Imagogenia

Este año un total de 13 periodistas fueron asesinados en México según informes del gobierno. Para la organización Reporteros Sin Fronteras, México es considerado uno de los países más peligrosos del mundo para ejercer, es más, Ucrania, que hoy atraviesa una guerra, es aún más seguro. Esta es la realidad que viven muchos de los que buscan informar lo que sucede en el país; y aún así nos preguntamos ¿por qué Ciro Gómez Leyva manejaba una camioneta blindada?

Bueno, como ya muchos sabemos el pasado 15 de diciembre el comunicador, Gómez Leyva sufrió un atentado, a la fecha el motivo se desconoce, los hechos son verdaderamente preocupantes, de eso no cabe la menor duda. Por ende, al día siguiente el presidente, Andrés Manuel López Obrador habló largo y tendido sobre el tema, reconoció sus diferencias con el comunicador y reiteró su apoyo para dar con los responsables. Hasta ahí, todo bien. O algo así.

El problema viene después, AMLO mantiene su postura de agredir a los medios y en este caso lo hace directamente contra periodista y cómo lo hizo: señalando que dentro de sus hipótesis considera que el atentado podría ser del crimen organizado o bien, que este fue un “autoatentado” gestado por la oposición para desestabilizar al gobierno federal. Esto viene después de que en redes sociales muchos usuarios señalaran al Presidente y su administración de querer silenciar al presentador de noticias, y como era de esperarse, eso no le gustó.

El panorama para AMLO se complica aún más cuando después de declarar que el ataque pudo ser un autoatentado, cerca de 180 periodistas le exigen detenga el hostigamiento contra la prensa; o tal vez no se ha complicado, porque al final el se siente arropado por el pueblo informado, pero ¿Quién informa al pueblo? Ah, claro las mañaneras.

Lo único cierto es que a la fecha, Andrés Manuel López Obrador, como presidente de México, ha hecho poco si no es que nada por emprender reformas o acciones que detengan la violencia que vive la prensa; aunque, siendo honestos, este cambio tiene que venir directamente desde él, el presidente hoy debe ver en la prensa un aliado y no un enemigo al que constantemente busca ridiculizar, desacreditar y estigmatizar porque la labor de los medios es, entre otras cosas, informar y evidenciar aquello que hace la administración pública, lo que también implica dar a conocer si no está haciendo una labor eficaz. Sin embargo, al presidente, este tipo de señalamientos le incomodan, y le incomodan al grado de haber construido un mensaje peligroso en contra de ellos, algo que, ciertamente está propiciando que se geste a su alrededor una imagen poco favorecedora pues muchos lo comienzan a percibir como un dictador, característica que indudablemente no debe alimentar.

Así que, si no es por el bien de los demás, al menos por el propio AMLO debería procurar sanar su relación con aquellos medios a los que ha tachado de neoliberales y conservadores, no para que hablen bien de él, pero mínimo para que se deje de construir una imagen negativa en su entorno.



Twitter: @Mar_Naa