CARPE DIEM

Arturo Argente

CARPE DIEM

Walt Whitman es un poeta, ensayista, periodista y humanista y es considerado el padre del verso libre. En 1865 escribió su famoso poema ¡Oh, Capitán! ¡Mi Capitán!, como homenaje a Abraham Lincoln tras de su magnicidio. Este poema narra la historia de un barco que lucha contra una gran tormenta y consigue llegar a puerto, aunque su capitán fallece durante la travesía. Con su muerte deja a su tripulación abandonada a su suerte, sin nadie que los guiase, pero consiguiendo salvar sus vidas. Ese barco es una metáfora del difícil momento que enfrentaron los Estados Unidos, un país que se sintió abandonado, desorientado y casi huérfano. Es un poema intenso, que refleja la impotencia y el dolor por la pérdida de una forma soberbia y tiene un nuevo significado para toda una generación y fue la frase que le dio origen a la cinta “La Sociedad de los Poetas Muertos”.  


En una escuela privada que solo tiene estudiantes hombres y que conversan animosamente mientras encuentran sus lugares, ingresa su maestro John Keating, interpretado por el inolvidable Robin Williams, quien los introduce en la belleza de la poesía.  “Carpe Diem”, “Aprovecha el día", fue la primera lección de Keating a aquellos estudiantes que se les inculcó la tradición, el honor, la disciplina y la excelencia como pilares fundamentales. "Somos comida de gusanos, muchachos, les decía el profesor “Hagan que sus vidas sean extraordinarias".


Perseguir los sueños y expresar lo que sienten es lo que mejor resume lo que Keating pretendía motivar en sus estudiantes. "En mi clase aprenderán a pensar por Uds. mismos", dijo Keating en una de sus primeras lecciones. "Aprenderán a saborear la palabra y el lenguaje. "No digan que están cansados, digan que están exhaustos". En una de sus cátedras, Keating se adueñó completamente del espacio que tenía y se subió a la mesa destinada al profesor. "Me he subido a la mesa para recordarme a mí mismo que debemos mirar constantemente las cosas de una manera diferente. El mundo se ve distinto desde aquí arriba. Si no me creen, vengan a probarlo".


Actualmente los jóvenes enfrentan diversos retos como el cambio climático, el racismo, la violencia en las calles, la falta de oportunidades laborales, el deterioro del medio ambiente, los derechos indígenas y de la mujer, la aceptación en la lucha de géneros y la corrupción. Los adolescentes que se indignan, salen a las calles para ser escuchados y marcar la agenda,  se manifiesta la amarga decepción en los sistemas democráticos. La participación política de los jóvenes en México es un tema relevante en la actualidad. El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) señala que en México 30% de la población total corresponde a jóvenes entre 15 y 29 años. Sin embargo, el INEGI también ha identificado que existe una baja participación de este sector de la población. Según el instituto, sólo 17% de los jóvenes entre 18 y 29 años votó en las elecciones presidenciales de 2018.


Los jóvenes mexicanos deben de entender la importancia de hacer propia su ruta y no seguir la establecida por otros, el joven debe encontrar su propio paso, su propia manera de caminar, en cualquier dirección, como quieran, sea ridícula, orgullosa, como sea. Pero cuidado, ser diferentes y seguir sus sueños, no implica arriesgar todo en un sinsentido. Hay un momento para el valor y otro para la prudencia, el que es inteligente, sabe distinguirlos.  Hagamos de México y de nuestras vidas algo extraordinario, joven expresa lo que sientes, piensa y decide con libertad, no digan que están cansados, ¡digan que están exhaustos!


Joven súbete a la mesa para que veas las cosas de manera diferente, verás que el mundo se ve distinto desde arriba. El 2 de junio vayan a votar por el partido que quieran, pero vayan a votar. ¡Aprovechen su vida!