¿Cómo solicitar apoyo externo en la empresa

Luis Alberto Alvarado Gudiño

¿Cómo solicitar apoyo externo en la empresa

Consejo estratégico


Cuando uno está a cargo de un equipo, uno de los principales problemas a los cuáles nos enfrentamos es el solicitar apoyo, pero no necesariamente dentro del equipo, sino el apoyo que se requiere de otras áreas o departamentos; pues el problema no es solicitar la ayuda, sino que esta sea realmente útil.
Por lo tanto, el encargado de un equipo, su rol ante estas situaciones, en primer lugar, debe analizar cómo se solicita, preguntar cómo va a ser esta ayuda y por supuesto agradecerla.
Colin M. Fisher, reconocido especialista en comunicación organizacional dentro de un equipo nos proporciona 3 tips para que esta sea eficaz y eficiente.
1. Primero, busca la claridad. Se tiene que guiar al equipo para que se defina claramente el problema o la situación, antes de solicitar apoyo; esto implica no sólo definirlo, sino que el equipo o la persona indique para qué requiere exactamente el apoyo. ¿cómo? Pregunte a esta persona o al equipo ¿Cómo ve el éxito en el trabajo con la resolución al problema o situación? Con base a la respuesta, repregunte, ¿cuál es exactamente la ayuda o explicación que requiere? Otra forma de hacerlo, ¿Qué les impide progresar? O ¿qué resultado buscan? De tal manera que sean claros y precisos en el apoyo requerido.


2. Este punto es el más interesante, el autor propone que se tienen que normalizar o estandarizar las solicitudes, de tal manera que sean específicas y claras, sin olvidar el para qué requiere ese apoyo. Esto es, que va a ganar la empresa (tiempo, ahorro económico, retrabajos, mejores mediciones, entre otros).


Con lo anterior se genera un clima de seguridad psicológica, elogiando las soluciones claras, las personas se explican claramente y transparentemente sobre sus necesidades, dentro de un equipo de trabajo no sólo el que usted está a cargo, sino la mayoría de los equipos que conforman el negocio o la empresa. De tal manera que con el tiempo, la colaboración sea parte del trabajo y no un favor.


3. Por lo tanto, se tiene que institucionalizar el seguimiento. Recuerde que la ayuda o el apoyo no termina con una pregunta y una respuesta, haga que sea esta una práctica estándar. Esto se logra animando a los equipos (de toda la empresa y en especial a su equipo), cómo la ayuda que proporción “x” persona, equipo o departamento ayudó y marcó una diferencia en el trabajo y en reconocer las contribuciones de los otras personas, equipos o departamentos.


Por lo anterior, logrará generar confianza en su personal y por otro lado, usted podrá detectar las fortalezas de sus colaboradores para futuros apoyos a otras áreas.