Dice el dicho: “Cuando veas las barbas de tu vecino cortar, pon las tuyas a remojar”. Y esto viene a cuento porque en los últimos, meses, semanas y días hemos visto una revolución total en diferentes partes del mundo. La geopolítica a nivel mundial se está reconfigurando y modificando con estos nuevos tiempos, en la que la tecnología, la comunicación y la modernidad influyen determinadamente para que las nuevas generaciones piensen y vean el mundo con diferentes ojos.
Piense usted, analice y observe qué leen, qué escuchan, qué publican en sus redes sociales o sencillamente cómo se expresan nuestros niñ@s y j@venes y jovencitas. Lo anterior desencadena una serie de inconvenientes para tener un mundo y un país con mayor orden y paz a nivel mundial.
La música agresiva, transgresora y agresiva, el exceso de violencia en el internet y las series de televisión, la falta de valores en la sociedad, que afectan no solo en lo particular, si no en lo general. Ahora somos parte de un sistema que en ocasiones jugamos el rol de víctimas y en otras nos convertimos en los victimarios. Por ejemplo hace una semana el 27 de junio, un joven de diecisiete años de edad de nombre Nahel Merzouk, originario del norte de África, fue asesinado por un policía en Nanterre, al noroeste de París. El agente declaró que su vida peligraba pero más tarde fue desmentido por un video que mostraba cómo dos policías lo perseguían y lo detenían, y después uno de ellos le disparó cuando él chico trataba de escapar. El video, difundido en las redes sociales, detonó las protestas, que litera hicieron arder a París, Marsella, Lyon y a muchas más ciudades de Francia. Fue una semana complicada en la que 150 alcaldías y 250 estaciones de policía, además de escuelas, clínicas y bibliotecas fueron violentadas. Cuarenta y cinco mil policías fueron movilizados para detener a cerca de tres mil personas. Entre la gran mayoría estaba chicos de 17 años de edad. Incluso algunos eran niños de 12 y 13 años. Estos disturbios muestran la indignación y tensión social que hay en Francia por el exceso de fuerza policiaca, la discriminación racial y el sentimiento de injusticia en los suburbios. Por cierto, esta es la tercera ola de protestas que sufre en sus seis años de gobierno el presidente Emmanuel Macron.
Por otra parte el siglo XXI está manchado además de una crisis ambiental y económica por una guerra desatada con la invasión de Rusia contra Ucrania lo cual ha significado una crisis para todo el planeta. Ya que desde que inicio el 24 de febrero de 2022 miles de civiles ucranianos han muerto e innumerables edificios han quedado destruidos además de las millones de personas que se han visto obligados a abandonar sus hogares en busca de nuevas vidas en poblaciones dentro y fuera de Europa.
Otro punto es el tema de la migración a nivel mundial una situación preocupante que se vive, convirtiendo este asunto en una grave crisis humanitaria, ya que pone en riesgo a niños, mujeres y hombres que son víctimas de la trata de personas y por supuesto de otra gran cantidad de crímenes que conlleva el movimiento ilegal de las personas. Por supuesto nuestro país no es la excepción y no es ajeno a este problema ya que por años ha sido un asunto de agenda entre Estados Unidos y México, además de por supuesto el narcotráfico.
Es por ello que menciono un poco de estos temas por que todo va entretejiéndose, de lo local, nacional, a lo internacional y con todo lo que tenemos que vivir en el día a día olvidamos lo importante que es tener líderes que puedan lidiar no solo con lo que hay dentro de nuestro país sino con todo lo que va hilándose alrededor de él.
El mundo se está moviendo, se está reconfigurando por ello es necesario prevenirse ante la transformación del mundo y como nación tenemos que estar listos para tener una sociedad preparada y educada, para estos nuevos retos. ¿De que vale tener un sinfín de tecnología y de inteligencia artificial, sino contamos con lo más importante que es el sentido de la humanidad? .
