Hay la percepción de que la 4T propició la renuncia de Gómez Sánchez.
Alberto Bazbaz terminaría siendo –otra vez- el impulsor en la FGJEM.
Atención con Germán Adolfo Castillo Banuet y Carlos Antonio Alpizar.
Partido del Trabajo creará comisiones
Morena se ha trepado, para riesgo del gobierno y del PRI, más de lo que se debe en el proceso de designación del próximo Fiscal General de Justicia del Estado de México (FGJEM).
Ganarle al Ejecutivo el anuncio oficial sobre la renuncia de Alejandro Jaime Gómez Sánchez generó la percepción de que la Cuarta Transformación (4T) propició la salida del fiscal y ahora, en el imaginario colectivo, ha florecido la idea de que el cambio en el Ministerio Público obedece a un escenario de acuerdo rumbo a las elecciones de gobernador del 2023.
El papel de Morena está delineado: entrampar el nombramiento del próximo fiscal, lo cual no es un buen signo para los planes que se tenían en el gobierno mexiquense, pues a partir de que Alejandro Gómez entregó su dimisión al Congreso los morenistas abanderaron el “no rotundo a la imposición del llamado “Fiscal Carnal”, como si éste fuese el principal eje de la rotación en la FGJEM.
¿De qué tendría que cuidarse el gobernador Alfredo Del Mazo al término de su administración si su relación con el gobierno federal y en especial con el presidente, Andrés Manuel López Obrador, es más que cordial en lo institucional y amigable en lo político?
En todo caso la renovación en la titularidad de la fiscalía sólo implicaría un desgaste político innecesario para el titular del Ejecutivo estatal, porque la negociación en la legislatura y con los opositores ya tiene visos de encarecimiento.
De entrada, los legisladores de Morena ya comenzaron a descalificar a más de uno de los posibles prospectos, como por ejemplo Edmundo Garrido, a quien en las últimas horas los legisladores mexiquenses de la 4T le recordaron que tiene una investigación por la manipulación de cifras del índice delictivo cuando fue alto funcionario de la extinta Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México.
Para quienes conocen realmente las entrañas ministeriales, saben perfectamente que ante un complejo escenario político se tendrá que recurrir a los expertos, como por ejemplo el impresentable ex procurador mexiquense, Alberto Bazbaz Sacal, conocido por el trágico caso de la niña “Paulette” y por ser señalado de encabezar la red de espionaje sobre la Cuarta Transformación.
Bazbaz Sacal fue el impulsor de los dos últimos procuradores y fiscal: Alfredo Castillo Cervantes y Alejandro Jaime Gómez Sánchez. Por eso y a partir de ahí, no hay que perder de vista –si de cosas serias se trata- a Germán Adolfo Castillo Banuet, Fiscal Especializado de Control Regional de la Fiscalía General de la República que encabeza, Alejandro Gertz Manero o a Carlos Antonio Alpizar, ex Secretario General de la Presidencia del Consejo de la Judicatura Federal, aunque éste último tiene denuncias que lo vinculan con procesos judiciales amañados a favor de empresarios.
Pero también no hay que olvidar que con el tema de género se vislumbran propuestas de mujeres, como el caso de Myrna García Morón, actual presidenta de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de México (CODHEM); no obstante, su incursión en el proceso de designación sería una abierta directriz sobre Alberto Bazbaz, de quien fue su secretaria particular.
CANCIÓN, DICHO O REFRÁN
Sana, sana, colita de rana…
Para amortiguar los múltiples descontentos y amagos de desbandada, el Partido del Trabajo del Estado de México creará en los siguientes días una serie de comisiones especiales dentro de la dirigencia. La intención es integrar a liderazgos y ex candidatos derrotados en los pasados comicios del 2021. Ana Yurixi Leyva, así como los ex diputados locales Francisco Solorza y Antonio Guadarrama, son parte de los personajes petistas que tendrán cabida en la de por sí abultada Comisión Ejecutiva Estatal, donde hay muchos generales y pocos soldados. Ese es el PT mexiquense, una red de políticos y vividores con membrete, salvo sus contadas excepciones.
Luces, cámara, acción…
Hace unas horas estuvo en Metepec el cineasta Tony Mark, quien -según se ha dicho- rodará una película en el Pueblo Mágico. Pero el magnate del filme no ha decidido qué cinta trabajará en la tierra del barro. Podemos recomendarle el remake de “El Bombero Atómico”, “El barrendero del PAN”, “Por siempre Rambo”, “Amores perros”, “Romeo y Fernando” o el “Queche”… perdón el “El Cheque sin fondos”. El protagonista ya lo tiene; un personaje polifacético al grado de adaptarse a cualquier guion y escena… próxima figura de Hollywood.