Por su propio bien, el máximo tribunal del país, este lunes tomo su segunda oportunidad de autoafirmarse y mostrar entereza ante las descalificaciones del Presidente y el acoso de sus simpatizantes, que arreció después que decidieran revertir la transferencia de la Guardia Nacional bajo el mando de la SEDENA.

Así, decidieron los ministros ignorar las peticiones de la Presidencia a través de la Consejería Jurídica y analizar el procedimiento Legislativo, coincidiendo 9 de 11 ministros en que no hubo debate real de los cambios a la Ley General de Comunicación Social y la Ley de Responsabilidades Administrativas, ni se justifico la urgencia de su aprobación, por lo que fueron revertidas sin llegar a analizar la constitucionalidad de los cambios.

En esta secuencia, suena lógico y esperado que la segunda parte del Plan B electoral sea también anulado al igual que la veintena de reformas reciente aprobadas en las cámaras arrollando los morenistas a sus opositores al aprobar sin dictámenes en comisiones y sin aceptar reservas, para desaparecer el INSABI, la Financiera Rural, modificar el CONACYT o dar más atribuciones en adquisiciones a la SFP y al ejército para administrar el Tren Maya y aeropuertos, entre otras cosas. Ya se verá.