Los saludo con afecto y mire Usted, ha sido una semana Santa complicada. Aun cuando la consulta para darle al presidente la oportunidad de continuar fue un revés muy duro, es decir, esperaban que, de un padrón de 90 millones de electores, votarán al menos 35, sólo lo hicieron 18, el desaire no le quita el sueño a Andrés, sigue mandando y ahora, viene el tema de la reforma eléctrica, y vaya que el show continúa, priistas, panistas y perredistas no querían que les madrugarán los de Morena y sus pequeños aliados e intentaron quedarse a dormir en el Congreso. Y como episodio barato de telenovela, este domingo se dará la votación y posiblemente no le alcanzarán los votos para aprobarla, a menos que se acepten modificaciones a la ley, o se acepte una nueva presentada por los aliados opositores, y ello sería un golpe fuerte al ego presidencial.


Y mientras, el país continúa metido en una ola de crimines inagotable, balaceras, enfrentamientos y feminicidios que, en lugar de asumir el problema como grave, y ponerse a la cabeza para resolverlo, como ha hecho en otros casos, López terminó por concebirlo como munición del enemigo y evadirlo. La paranoia gubernamental ha procreado un fantasma que le han impedido gobernar como él quiere, y como piensa que debe hacerse para no parecerse en nada a los gobiernos del pasado.


Las cosas no le están saliendo bien y, desde los #AMLOfest, hasta los minutos de silencio por la pandemia de COVID-19, Andrés Manuel lleva ya 13 informes en lo que lleva de mandato, que inició aquel primero de diciembre de 2018, y en todos habla de haber cumplido todos sus compromisos, y quizá si, sólo que, en lugar de colocar a México como una nación progresista, generadora de empleos, salud, seguridad y mecanismos de bienestar, la ha dejado en una pobreza social que quizá sea el factor de desaire o regaño del pueblo y que se reflejó en las urnas de ese show del pasado domingo.


Pero no deberían emocionarse los opositores priistas y panistas, ok, también los perredistas y de movimiento ciudadano, y no deberían porque esos bajones en las preferencias tampoco les son favorables a ellos.


Por lo significativo del domingo de resurrección, ya muchos clanes de la política se lamen los bigotes, sin embargo ¡ojo! A 26 meses de las elecciones presidenciales de 2024, la oposición no tiene cuadros competitivos para disputarle la presidencia a Morena ni agenda con la que pueda atraer el voto de los que están en desacuerdo o desencantados del gobierno del presidente, mi twiter @raulmandujano