Opiniones

¡El Pañuelo Verde no es una moda, es un derecho!

¡El Pañuelo Verde no es una moda, es un derecho!

Opinión de Vanessa Meléndez Valles

Este años se cumplieron XV años de la despenalización del aborto en la Ciudad de México, y en el Estado de México aún están trabajando para la integración de las iniciativas que planean presentar en el Congreso mexiquense para regular la Interrupción Legal del Embarazo (ILE). Es verdaderamente lamentable que en nuestra entidad las mujeres sigan realizando este procedimiento de manera clandestina, poniendo en riesgo su vida o con algunas consecuencias terribles para ellas o en el mejor de los casos, si tienen las posibilidades las mujeres puedan acudir a realizar esta intervención para realizarla de manera legal y segura a la CDMX, ya que en la entidad mexiquense no lo es, como también sucede en otros ocho estados dando pie al aumento del turismo abortivo.

Según las estadísticas de la Secretaría de Salud de la Ciudad de México, las mujeres mexiquenses son las que demandaron más el servicio de la Interrupción Legal del Embarazo al contar con 64,077 casos de 2007 a junio de 2021.

Incluso llama la atención que es más perseguido el tema del aborto en el Estado de México que el feminicidio y es que de acuerdo cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), en el Estado de México se abrieron 165 carpetas de investigación por aborto frente a 157 indagaciones de feminicidio. Incluso en la Ciudad de México, donde pese a que la interrupción del embarazo es legal hasta las 12.6 semanas de gestación, se iniciaron 112 procesos por aborto frente a 71 por feminicidio.

En nuestra actualidad como sociedad nos encontramos con grupos que se dan golpes de pecho por este tema y otros más como la homosexualidad; pero ya no es válido asustarse por asuntos que todos sabemos que existen, es más inhumano traer al mundo a un hijo y no brindarle una calidad de vida digna y causarle un daño no solo a él sino a la sociedad por no proporcionarle los derechos básicos que necesita como ser humano o bien es válido que las mujeres decidan por las causas que sean el no tener un bebé, como son: desarrollo personal, violación, el nulo deseo de ser madres o quizás la inmadurez por serlo en determinado momento de la vida, un descuido, es más ¿Cuántos de nosotros hemos conocido a mujeres que no se dan cuenta que estaban embarazada hasta que tiene una emergencia obstétrica? Ellas pudieron ser acusadas de no haberse cuidado y ser negligentes.

La sociedad en la que vivimos fue organizada predominantemente por los hombres y ellos siguen sin entender que las mujeres y el papel que tenemos en la sociedad cambió. Por ello una gran cantidad de mujeres que ha vivido violencia sexista y muertes por aborto clandestino de sus hijas, gestaciones forzadas por el aborto ilegal y muchos temas más, han usado el pañuelo verde con el objeto de identificar globalmente al movimiento por el aborto legal.

El Estado de México no es rosa, tiene manchas de sangre de las mujeres que desaparecen, que matan a golpes, que las matan por ser soló mujeres y también está manchando por una interrupción del embarazo en lugares clandestinos que no son seguros.

En el año 2021 la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) declaró la inconstitucionalidad de la penalización del aborto a nivel nacional. El aborto legal, seguro y gratuito, debe ser una realidad en todo el país, pues despenalizar la interrupción del embarazo no se traduce en garantizarlo como un derecho.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) reportó que unas 39.000 mujeres mueren cada año como resultado de los más de dos millones de abortos inseguros que se practican en el mundo, por ello presentó una nueva guía sobre la atención del aborto, que tiene como objetivo ayudar a los países a ofrecer ese tipo de atención crucial a las mujeres y las niñas. Ya es tiempo de dejar de estigmatizar algo que es una realidad.

Por cierto la imagen que ilustra esta columna pertenece a Paula Rego una artista portuguesa y ella fue una de las primeras pintoras en tratar el aborto desde el punto de vista de la experiencia de las mujeres.