Derechos en la Era Digital. Luis Ricardo Sánchez Hernández
El inicio de la guerra también es digital, y por ello, el programa de recompensas por la justicia des Estados Unidos, ofrece una recompensa de hasta $10 millones por información que conduzca a la identificación o ubicación de cualquier persona que, mientras actúa bajo la dirección o el control de un gobierno extranjero, participe en actividades cibernéticas maliciosas contra la infraestructura crítica de EE. UU. en violación de la Ley de Abuso y Fraude Informático.
Ciertas operaciones cibernéticas maliciosas dirigidas a la infraestructura crítica de los EE. UU. violan la CFAA. Las violaciones del estatuto incluyen la transmisión de amenazas de extorsión como parte de los ataques de ransomware; acceso intencional no autorizado a una computadora o exceder el acceso autorizado y, por lo tanto, obtener información de cualquier computadora protegida; causar a sabiendas la transmisión de un programa, información, código o comando, y como resultado de tal conducta, causar daño intencionalmente sin autorización a una computadora protegida. Las computadoras protegidas incluyen no solo los sistemas informáticos del gobierno de los EE. UU. y de las instituciones financieras, sino también los que se usan o afectan el comercio o las comunicaciones interestatales o extranjeras.
Para mayor información, pueden acceder al enlace: https://rewardsforjustice.net/rewards/foreign-malicious-cyber-activity-against-u-s-critical-infrastructure/, y porque los derechos en la era digital, también tutelan la ciberseguridad, seguimos compartiendo experiencias de los sucesos en marzo, a través de @luisricardosh en Twitter.
Ciertas operaciones cibernéticas maliciosas dirigidas a la infraestructura crítica de los EE. UU. violan la CFAA. Las violaciones del estatuto incluyen la transmisión de amenazas de extorsión como parte de los ataques de ransomware; acceso intencional no autorizado a una computadora o exceder el acceso autorizado y, por lo tanto, obtener información de cualquier computadora protegida; causar a sabiendas la transmisión de un programa, información, código o comando, y como resultado de tal conducta, causar daño intencionalmente sin autorización a una computadora protegida. Las computadoras protegidas incluyen no solo los sistemas informáticos del gobierno de los EE. UU. y de las instituciones financieras, sino también los que se usan o afectan el comercio o las comunicaciones interestatales o extranjeras.
Para mayor información, pueden acceder al enlace: https://rewardsforjustice.net/rewards/foreign-malicious-cyber-activity-against-u-s-critical-infrastructure/, y porque los derechos en la era digital, también tutelan la ciberseguridad, seguimos compartiendo experiencias de los sucesos en marzo, a través de @luisricardosh en Twitter.
