- Mujeres que laboran en la Plaza de la Computación de Toluca denunciaron hostigamiento sexual a través de la plataforma de Telegram. Algunas han decidido renunciar a su empleo para alejarse del acecho.
Este fin de semana varias jóvenes que laboran en la Plaza de la Computación de Toluca denunciaron hostigamiento sexual a través de la plataforma de Telegram.
Una de las víctimas se contactó con el periódico El Valle para denunciar los hechos y pedir ser vínculo con las autoridades.
La también estudiante, detalló que se trata de un grupo de Telegram que está conformado por varios hombres incluyendo a elementos de la policía y menores de edad. Asimismo, expuso que los sujetos solicitan fotografías íntimas de las trabajadoras, mientras que otros brindan información como el número del local en el que trabajan y las puertas por las que las jóvenes tienen acceso al inmueble.
"Circulan fotos de muchas chavas, de su perfil de Facebook y ellos mencionan que quieren conseguir su pack, no solo tienen la dirección de mi trabajo, sino de varias de esta plaza. Hay un chico que se enfoca en mí, pide mi pack y es el que da la dirección de mi trabajo, otro le respondió que me iría a buscar hasta conseguir lo que quiere", explicó la trabajadora.
Aseveró que por esta razón y debido al miedo que le genera se vio en la necesidad de abandonar su trabajo para salvaguardar su integridad.
"Pienso que tal vez son de la misma plaza, ya que hace tiempo algunos chavos me molestaban, pero yo siempre los ignoraba. Aunque también pienso que quizá sean clientes porque también me molestaban", agregó.
Refirió que tras enterarse de la existencia del grupo de Telegram realizó una denuncia ante la policía cibernética, sin embargo, la respuesta y solución a la situación fue poco favorable. "Tomaron mis datos, pero me dieron otro número para comunicarme directamente con la policía cibernética, a lo cual me respondieron que no había delito que perseguir porque no me hicieron nada, solo me dijeron que borrara mis redes sociales".
Agregó que los elementos de la policía cibernética le recomendaron realizar una predenuncia en la Fiscalía General de Justicia del Estado de México.
Siguiendo el consejo de las autoridades, la víctima llevó a cabo este procedimiento, no obstante, la FGJEM le solicitó contactarse con el Centro de Justicia para las Mujeres, donde le comentaron que se comunicara el día martes, pues aún no contaban con el registro de su predenuncia.
"Es muy delicada la situación, me gustaría que la administración de la plaza tomara ciertas medidas", finalizó.
El Senado de la República aprobó las reformas a la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia y del Código Penal Federal para sancionar la Violencia Digital, reforma conocida como Ley Olimpia.
Este dictamen tipifica y sanciona el acoso, hostigamiento y difusión de contenido sexual en plataformas de internet o redes sociales, así como las agresiones en contra de mujeres en medios de comunicación, alcanzando penas de tres a seis años de prisión.
Dicha reforma busca sancionar la difusión de contenido íntimo sin consentimiento qué afecta la vida privada de las personas, su intimidad, dignidad y libre desarrollo de su personalidad.
La Ley Olimpia obliga a la autoridad competente a bajar o bloquear de los espacios publicados los contenidos difundidos sin consentimiento de las personas denunciantes como medida de precaución e inhibición de la conducta conocida como violencia digital.
De acuerdo con las cifras del Informe de Violencia en Línea contra las Mujeres, el 87.2% de las víctimas de los casos de esta violencia son mujeres, además de que siete de cada 10 videos sexuales se difunden sin consentimiento.
Una de las víctimas se contactó con el periódico El Valle para denunciar los hechos y pedir ser vínculo con las autoridades.
La también estudiante, detalló que se trata de un grupo de Telegram que está conformado por varios hombres incluyendo a elementos de la policía y menores de edad. Asimismo, expuso que los sujetos solicitan fotografías íntimas de las trabajadoras, mientras que otros brindan información como el número del local en el que trabajan y las puertas por las que las jóvenes tienen acceso al inmueble.
"Circulan fotos de muchas chavas, de su perfil de Facebook y ellos mencionan que quieren conseguir su pack, no solo tienen la dirección de mi trabajo, sino de varias de esta plaza. Hay un chico que se enfoca en mí, pide mi pack y es el que da la dirección de mi trabajo, otro le respondió que me iría a buscar hasta conseguir lo que quiere", explicó la trabajadora.
Aseveró que por esta razón y debido al miedo que le genera se vio en la necesidad de abandonar su trabajo para salvaguardar su integridad.
"Pienso que tal vez son de la misma plaza, ya que hace tiempo algunos chavos me molestaban, pero yo siempre los ignoraba. Aunque también pienso que quizá sean clientes porque también me molestaban", agregó.
Refirió que tras enterarse de la existencia del grupo de Telegram realizó una denuncia ante la policía cibernética, sin embargo, la respuesta y solución a la situación fue poco favorable. "Tomaron mis datos, pero me dieron otro número para comunicarme directamente con la policía cibernética, a lo cual me respondieron que no había delito que perseguir porque no me hicieron nada, solo me dijeron que borrara mis redes sociales".
Agregó que los elementos de la policía cibernética le recomendaron realizar una predenuncia en la Fiscalía General de Justicia del Estado de México.
Siguiendo el consejo de las autoridades, la víctima llevó a cabo este procedimiento, no obstante, la FGJEM le solicitó contactarse con el Centro de Justicia para las Mujeres, donde le comentaron que se comunicara el día martes, pues aún no contaban con el registro de su predenuncia.
"Es muy delicada la situación, me gustaría que la administración de la plaza tomara ciertas medidas", finalizó.
El Senado de la República aprobó las reformas a la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia y del Código Penal Federal para sancionar la Violencia Digital, reforma conocida como Ley Olimpia.
Este dictamen tipifica y sanciona el acoso, hostigamiento y difusión de contenido sexual en plataformas de internet o redes sociales, así como las agresiones en contra de mujeres en medios de comunicación, alcanzando penas de tres a seis años de prisión.
Dicha reforma busca sancionar la difusión de contenido íntimo sin consentimiento qué afecta la vida privada de las personas, su intimidad, dignidad y libre desarrollo de su personalidad.
La Ley Olimpia obliga a la autoridad competente a bajar o bloquear de los espacios publicados los contenidos difundidos sin consentimiento de las personas denunciantes como medida de precaución e inhibición de la conducta conocida como violencia digital.
De acuerdo con las cifras del Informe de Violencia en Línea contra las Mujeres, el 87.2% de las víctimas de los casos de esta violencia son mujeres, además de que siete de cada 10 videos sexuales se difunden sin consentimiento.
