Por 7 votos contra 4, el consejo general determinó ayer no sancionar al priista Alfredo del Mazo por el reparto de miles de tarjetas "Salario Rosa" y "Con Todo" en la elección del Edomex.
En cambio, multó con 918 mil 720 pesos la entrega de 600 mil monederos por parte de la campaña del también priista Miguel Riquelme en Coahuila.
El consejero presidente, Lorenzo Córdova, quien votó a favor de sancionar el reparto de tarjetas en ambos estados, remarcó que la votación sobre esa conducta incidiría en la certeza de la elección de 2018.
Advirtió que un gasto que puede considerarse de propaganda se convertía en una promesa de dádiva.
"Consecuentemente, eso es un gasto indebido, un gasto que, de cara a la elección de 2018, no podemos permitir sea considerado como un gasto de campaña", dijo Córdova.
"El planteamiento de ‘por elecciones sin tarjetas’ me parece que es un buen propósito", añadió.
Sin embargo, los consejeros Benito Nacif, Marco Baños y Enrique Andrade rechazaron la petición porque, arguyeron, en Coahuila hubo un reconocimiento explícito de parte del PRI de que estaba conformando un "padrón" de potenciales beneficiarios en caso de que triunfara Riquelme, lo que le valió la multa.
Pero en el Estado de México, argumentaron, las tarjetas fueron repartidas con un tríptico de propaganda del cual se desprendía un formulario en el que los simpatizantes debían anotar nombre, teléfono y firma sólo si querían recibir más información, es decir, voluntariamente.
La consejera Pamela San Martín dijo que las tarjetas crearon en los electores una expectativa de que accederían a los beneficios sólo si votaban por Del Mazo, lo que acreditaría el supuesto de la coacción del voto.
"Están construyendo la percepción de que en Coahuila sí es factible anular, y en el Edomex, mantener la impunidad de Del Mazo", acusó el representante de Morena Horacio Duarte.
El consejero Ciro Murayama insistió en que el reparto de tarjetas no era sano para la contienda democrática.
Fuente: JoseCardenas.com