Están listos los 10 Pueblos Mágicos para recibir a visitantes durante el periodo vacacional de diciembre.
Resaltan que vivirán una Experiencia Edoméx en los destinos que cuentan con grandeza histórica, natural, cultural, gastronómica y artesanal.
Resaltan que vivirán una Experiencia Edoméx en los destinos que cuentan con grandeza histórica, natural, cultural, gastronómica y artesanal.
La Secretaría de Cultura y Turismo, a través de la Subsecretaría de Turismo, invita a vivir una Experiencia Edoméx en familia o con amigos, en sus 10 Pueblos Mágicos en los que podrán ver su riqueza natural y disfrutar de diversas actividades culturales, deportivas, gastronómicas y artesanales durante estos días de descanso.
Aculco está rodeado de peñascos y cascadas, cuenta entre sus tesoros con una parte del Camino Real Tierra Adentro, ruta comercial y de transporte más importante de México en el siglo XVI, y cabe decir que es Patrimonio Cultural de la Humanidad.
Por otra parte, descubrir las leyendas y misterios que esconden los Lavaderos Públicos es una aventura maravillosa, construidos en 1882, así como degustar ricos quesos elaborados artesanalmente.
El Pueblo Mágico de El Oro conserva su esplendor minero y belleza arquitectónica a través de majestuosas construcciones como el Palacio municipal, que resalta por sus acabados de madera y su mural Génesis Minera.
El Teatro Juárez es otro recinto que ofrece su estilo neoclásico y fachadas de cantera rosa, o si lo que desean es estar en contacto con la naturaleza se puede caminar o cabalgar a caballo por las orillas del lago artificial de la Presa Brockman y llevar a casa una artesanía elaborada con ocoxal.
Para descanso, energía y salud se puede visitar el Pueblo Mágico de Ixtapan de la Sal, por sus aguas termales como las del Balneario Municipal “El Bañito”, en los spas de la zona o en los temazcales.
Su clima soleado hace disfrutar de sus nieves artesanales y caminar por los diversos locales de artesanías de alfarería y madera.
Malinalco, por su parte, con una esencia prehispánica única y original en la zona arqueológica de Cuautinchán o El Cerro de los Ídolos, en el que se admira un templo monolítico, único en su tipo en todo el continente americano.
Para quienes disfrutan de la aventura este Pueblo Mágico ofrece espacios naturales para practicar rappel, escalada, realizar un paseo en bicicleta y hasta volar en parapente, sin que olviden degustar la diversidad gastronómica y probar sus tradicionales nieves de sabores.
Para disfrutar del talento local, Metepec es cuna de una de las piezas artesanales más representativas del Estado de México y de todo el país: El Árbol de la Vida.
Con las calles del centro las y los visitantes pueden admirar el Cerro de los Magueyes así como con su Capilla de la Virgen de los Dolores, además de que pueden vivir una experiencia en los talleres artesanales para después disfrutar de la diversidad gastronómica del sitio.
Teotihuacán y San Martín de las Pirámides comparten el nombramiento de Pueblo Mágico. En sus valles emerge la zona arqueológica más representativa de Mesoamérica y Patrimonio Cultural de la Humanidad, con sus imponentes pirámides de El Sol y La Luna, así como la Calzada de los Muertos y el Templo de Quetzalcóatl, las cuales se pueden admirar durante un vuelo en Globo Aerostático al amanecer.
Puedes degustar licores y conservas de tuna y xoconostle, sin dejar de probar la gastronomía de la región con platillos prehispánicos.
La riqueza cultural, histórica y natural de Tepotzotlán es otra alternativa, y durante este tiempo que obtuvo su nombramiento como el primer Pueblo Mágico en el Estado de México. Su Museo Nacional del Virreinato ofrece al visitante un espacio lleno de historia para después disfrutar de hermosos paisajes en la Presa la Concepción o el Parque Xochitla y pasear en bicicleta o hacer un poco de senderismo.
Las y los visitantes no se pueden ir de este lugar sin admirar Los Arcos del Sitio, monumental obra hidráulica construida entre los siglos XVIII y XIX.
Para los amantes de la aventura se pueden realizar diferentes actividades en el Pueblo Mágico de Tonatico al recorrer las Grutas de la Estrella, tras un descenso de 400 escalones los turistas pueden caminar sobre puentes iluminados y admirar las estalagmitas y estalactitas para después relajarse con aguas termales y una mascarilla de barro en el Balneario municipal.
El más visitado en el Estado de México es el Pueblo Mágico de Valle de Bravo, rodeado de paisajes naturales boscosos y en el que los visitantes pueden admirar su lago artificial en alguno de sus miradores y en el que se practican deportes extremos y acuáticos.
En la Plaza Mazahua o el Mercado de Artesanías se pueden comprar piezas de cerámica de barro vidriado, hierro forjado, tejido, bordado, deshilado, cerámica de alta temperatura, cestería de ocoxal y mucho más.
Villa del Carbón continúa con su esplendor cultural de la época colonial y su belleza natural al estar rodeado de montañas y vegetación. Sus calles empedradas y la arquitectura de sus casas de adobe son perfectas para una postal.
Se pueden realizar actividades diferentes entre deporte extremo, acampar o descansar en sitios como la Presa del Llano, Presa Taxhimay, Presa Juárez, Llano de Lobos, Parque La Angora, Rancho San Miguel o el Museo del Porcelanizado.
La variedad artesanal se distingue por artículos elaborados en piel, lana o conejo y este Pueblo Mágico es reconocido como la Capital del Botín Charro.
Los 10 Pueblos Mágicos del Estado de México están listos para recibir a las y los visitantes con los respectivos protocolos sanitarios y de higiene. Además, diversos negocios cuentan con distinciones que los hacen ser un destino seguro como el Sello Safe Travels, Distintivo H y Espacios Naranja.
Aculco está rodeado de peñascos y cascadas, cuenta entre sus tesoros con una parte del Camino Real Tierra Adentro, ruta comercial y de transporte más importante de México en el siglo XVI, y cabe decir que es Patrimonio Cultural de la Humanidad.
Por otra parte, descubrir las leyendas y misterios que esconden los Lavaderos Públicos es una aventura maravillosa, construidos en 1882, así como degustar ricos quesos elaborados artesanalmente.
El Pueblo Mágico de El Oro conserva su esplendor minero y belleza arquitectónica a través de majestuosas construcciones como el Palacio municipal, que resalta por sus acabados de madera y su mural Génesis Minera.
El Teatro Juárez es otro recinto que ofrece su estilo neoclásico y fachadas de cantera rosa, o si lo que desean es estar en contacto con la naturaleza se puede caminar o cabalgar a caballo por las orillas del lago artificial de la Presa Brockman y llevar a casa una artesanía elaborada con ocoxal.
Para descanso, energía y salud se puede visitar el Pueblo Mágico de Ixtapan de la Sal, por sus aguas termales como las del Balneario Municipal “El Bañito”, en los spas de la zona o en los temazcales.
Su clima soleado hace disfrutar de sus nieves artesanales y caminar por los diversos locales de artesanías de alfarería y madera.
Malinalco, por su parte, con una esencia prehispánica única y original en la zona arqueológica de Cuautinchán o El Cerro de los Ídolos, en el que se admira un templo monolítico, único en su tipo en todo el continente americano.
Para quienes disfrutan de la aventura este Pueblo Mágico ofrece espacios naturales para practicar rappel, escalada, realizar un paseo en bicicleta y hasta volar en parapente, sin que olviden degustar la diversidad gastronómica y probar sus tradicionales nieves de sabores.
Para disfrutar del talento local, Metepec es cuna de una de las piezas artesanales más representativas del Estado de México y de todo el país: El Árbol de la Vida.
Con las calles del centro las y los visitantes pueden admirar el Cerro de los Magueyes así como con su Capilla de la Virgen de los Dolores, además de que pueden vivir una experiencia en los talleres artesanales para después disfrutar de la diversidad gastronómica del sitio.
Teotihuacán y San Martín de las Pirámides comparten el nombramiento de Pueblo Mágico. En sus valles emerge la zona arqueológica más representativa de Mesoamérica y Patrimonio Cultural de la Humanidad, con sus imponentes pirámides de El Sol y La Luna, así como la Calzada de los Muertos y el Templo de Quetzalcóatl, las cuales se pueden admirar durante un vuelo en Globo Aerostático al amanecer.
Puedes degustar licores y conservas de tuna y xoconostle, sin dejar de probar la gastronomía de la región con platillos prehispánicos.
La riqueza cultural, histórica y natural de Tepotzotlán es otra alternativa, y durante este tiempo que obtuvo su nombramiento como el primer Pueblo Mágico en el Estado de México. Su Museo Nacional del Virreinato ofrece al visitante un espacio lleno de historia para después disfrutar de hermosos paisajes en la Presa la Concepción o el Parque Xochitla y pasear en bicicleta o hacer un poco de senderismo.
Las y los visitantes no se pueden ir de este lugar sin admirar Los Arcos del Sitio, monumental obra hidráulica construida entre los siglos XVIII y XIX.
Para los amantes de la aventura se pueden realizar diferentes actividades en el Pueblo Mágico de Tonatico al recorrer las Grutas de la Estrella, tras un descenso de 400 escalones los turistas pueden caminar sobre puentes iluminados y admirar las estalagmitas y estalactitas para después relajarse con aguas termales y una mascarilla de barro en el Balneario municipal.
El más visitado en el Estado de México es el Pueblo Mágico de Valle de Bravo, rodeado de paisajes naturales boscosos y en el que los visitantes pueden admirar su lago artificial en alguno de sus miradores y en el que se practican deportes extremos y acuáticos.
En la Plaza Mazahua o el Mercado de Artesanías se pueden comprar piezas de cerámica de barro vidriado, hierro forjado, tejido, bordado, deshilado, cerámica de alta temperatura, cestería de ocoxal y mucho más.
Villa del Carbón continúa con su esplendor cultural de la época colonial y su belleza natural al estar rodeado de montañas y vegetación. Sus calles empedradas y la arquitectura de sus casas de adobe son perfectas para una postal.
Se pueden realizar actividades diferentes entre deporte extremo, acampar o descansar en sitios como la Presa del Llano, Presa Taxhimay, Presa Juárez, Llano de Lobos, Parque La Angora, Rancho San Miguel o el Museo del Porcelanizado.
La variedad artesanal se distingue por artículos elaborados en piel, lana o conejo y este Pueblo Mágico es reconocido como la Capital del Botín Charro.
Los 10 Pueblos Mágicos del Estado de México están listos para recibir a las y los visitantes con los respectivos protocolos sanitarios y de higiene. Además, diversos negocios cuentan con distinciones que los hacen ser un destino seguro como el Sello Safe Travels, Distintivo H y Espacios Naranja.
