- Asegura que será un beneficio para los mexicanos, porque en gobiernos anteriores hubo "contubernio" para saquear al país
- La opinión pública considera que el tema puede ser un distractor sobre asuntos ingratos de mayor interés.
- La opinión pública considera que el tema puede ser un distractor sobre asuntos ingratos de mayor interés.
El presidente Andrés Manuel López Obrador propuso poner “en pausa” las relaciones entre México y España para respetarnos y que “no nos vean como tierra de conquista".
Señaló que esa pausa es conveniente para los pueblos de España y México.
“Ahora no es buena la relación y a mí me gustaría que hasta nos tardáramos en que se normalizara para hacer una pausa, que yo creo que nos va a convenir a los mexicanos y a los españoles.
“Hacer una pausa en las relaciones, porque era un contubernio arriba, una promiscuidad económica, política, en la cúpula, de los gobiernos de México y España, pero como tres sexenios seguidos y México se llevaba la peor parte, nos saqueaban”.
Durante su conferencia de prensa, El ejecutivo federal consideró que una vez termine su sexenio podrían normalizarse las relaciones.
“Entonces vale más darnos un tiempo, una pausa, a lo mejor ya cuando cambie el gobierno, ya se restablecen las relaciones y yo desearía porque ya no estaría aquí que no fueran igual que antes”.
Indicó que México su intención es mantener buenas relaciones con todos los gobiernos y los pueblos del mundo, pero no queremos que nos roben.
“Así como los españoles no quieren que lleguen de ningún país a robarles, tampoco lo queremos nosotros, vamos a esperar”.
Al respecto, el Canciller Marcelo Ebrard evadió comentar al respecto, mientras en el Senado de la República, integrantes de la bancada de Morena se mostraron sorprendidos por la declaración del Ejecutivo, de la cual el coordinador del Grupo, Ricardo Monreal, aceptó no saber.
El gobierno español, pronto acusó recibo de la intención del mandatario mexicano, disponiéndose a analizar los alcances de la misma advirtiendo que no hay un concepto de "Pausa" aplicable a las relaciones diplomáticas entre ambos países y tampoco es una decisión que este circunscrita a una decisión personal.
En la opinión pública, además de la sorpresa, el anuncio presidencial pronto esto empezó a tomarse como un intento de distractor, ante la presión creciente ejercida por el tema de la "Casa del Bienestar" atribuida al primogénito de López Obrador abriendo una ruta de críticas por un posible caso de conflicto de interés o tráfico de influencias que hasta ahora no se ha aceptado investigar formalmente.
Señaló que esa pausa es conveniente para los pueblos de España y México.
“Ahora no es buena la relación y a mí me gustaría que hasta nos tardáramos en que se normalizara para hacer una pausa, que yo creo que nos va a convenir a los mexicanos y a los españoles.
“Hacer una pausa en las relaciones, porque era un contubernio arriba, una promiscuidad económica, política, en la cúpula, de los gobiernos de México y España, pero como tres sexenios seguidos y México se llevaba la peor parte, nos saqueaban”.
Durante su conferencia de prensa, El ejecutivo federal consideró que una vez termine su sexenio podrían normalizarse las relaciones.
“Entonces vale más darnos un tiempo, una pausa, a lo mejor ya cuando cambie el gobierno, ya se restablecen las relaciones y yo desearía porque ya no estaría aquí que no fueran igual que antes”.
Indicó que México su intención es mantener buenas relaciones con todos los gobiernos y los pueblos del mundo, pero no queremos que nos roben.
“Así como los españoles no quieren que lleguen de ningún país a robarles, tampoco lo queremos nosotros, vamos a esperar”.
Al respecto, el Canciller Marcelo Ebrard evadió comentar al respecto, mientras en el Senado de la República, integrantes de la bancada de Morena se mostraron sorprendidos por la declaración del Ejecutivo, de la cual el coordinador del Grupo, Ricardo Monreal, aceptó no saber.
El gobierno español, pronto acusó recibo de la intención del mandatario mexicano, disponiéndose a analizar los alcances de la misma advirtiendo que no hay un concepto de "Pausa" aplicable a las relaciones diplomáticas entre ambos países y tampoco es una decisión que este circunscrita a una decisión personal.
En la opinión pública, además de la sorpresa, el anuncio presidencial pronto esto empezó a tomarse como un intento de distractor, ante la presión creciente ejercida por el tema de la "Casa del Bienestar" atribuida al primogénito de López Obrador abriendo una ruta de críticas por un posible caso de conflicto de interés o tráfico de influencias que hasta ahora no se ha aceptado investigar formalmente.
