Navegando en la red, encontramos un artículo de Silke Staab investigadora de ONU Mujeres, habla precisamente de la condición a la que llegan las mujeres después de toda una vida al cuidado de su familia y amistades.
Silke Staab es especialista de Investigación desde 2014 y una de las autoras de Progreso de las Mujeres en el Mundo, politóloga y doctora en políticas sociales y la igualdad de género en Chile 2013.
El envejecer es inevitable, pero lo que puede ser inevitable son las injusticias ligadas al género, las mujeres de edad avanzada a menudo viven en la pobreza sin que nadie cuide de ellas, es tiempo para voltear a ver a las personas jubiladas y su pobreza, procurarles servicios y cuidados decentes para todas y todos.
La especialista calcula que la población mundial mayor de 60 años se duplicará en la primera mitad de este siglo, alcanzando a los 2.000 millones de personas en el 2050. Lo cual hizo plantear varias interrogantes importantes. ¿Serán capaces los sistemas de salud y pensiones de hacer frente al desafío del envejecimiento de la población? ¿Quién cuidará al creciente número de personas ancianas dependientes? Cuestionamientos interesantes y apropiados para diseñar políticas adecuadas y evitar una situación difícil o que se avecine un problema político, sobre todo en países desarrollados.
Por otro lado, el informe insignia de ONU Mujeres, El progreso de las mujeres en el mundo 2015-2016, pone de manifiesto que, con políticas adecuadas, es posible marcar la diferencia. Las pensiones sociales universales pueden ser una poderosa herramienta para proporcionar seguridad de los ingresos básicos y cerrar las brechas de género en la cobertura de las pensiones: este tipo de pensiones establecen el derecho de todas las personas mayores, mujeres y hombres, a disfrutar de una pensión de vejez, con independencia de su historial laboral y situación familiar.
El articulo refiere al final que la adopción de estas medidas exigirá un compromiso político y una considerable inversión de recursos. Pero seamos claros: la alternativa no puede ser nunca delegar el trabajo de cuidados no remunerado en las mujeres para abandonarlas a la pobreza cuando llegan a la vejez.
Si es de su interés, pueden consultar el articulo entero en las siguiente dirección: http://www.unwomen.org/es/news/stories/2015/9/experts-take-old-age-a-double-whammy-for-women#sthash.Ff8a5fRY.dpuf
Silke Staab es especialista de Investigación desde 2014 y una de las autoras de Progreso de las Mujeres en el Mundo, politóloga y doctora en políticas sociales y la igualdad de género en Chile 2013.
El envejecer es inevitable, pero lo que puede ser inevitable son las injusticias ligadas al género, las mujeres de edad avanzada a menudo viven en la pobreza sin que nadie cuide de ellas, es tiempo para voltear a ver a las personas jubiladas y su pobreza, procurarles servicios y cuidados decentes para todas y todos.
La especialista calcula que la población mundial mayor de 60 años se duplicará en la primera mitad de este siglo, alcanzando a los 2.000 millones de personas en el 2050. Lo cual hizo plantear varias interrogantes importantes. ¿Serán capaces los sistemas de salud y pensiones de hacer frente al desafío del envejecimiento de la población? ¿Quién cuidará al creciente número de personas ancianas dependientes? Cuestionamientos interesantes y apropiados para diseñar políticas adecuadas y evitar una situación difícil o que se avecine un problema político, sobre todo en países desarrollados.
Por otro lado, el informe insignia de ONU Mujeres, El progreso de las mujeres en el mundo 2015-2016, pone de manifiesto que, con políticas adecuadas, es posible marcar la diferencia. Las pensiones sociales universales pueden ser una poderosa herramienta para proporcionar seguridad de los ingresos básicos y cerrar las brechas de género en la cobertura de las pensiones: este tipo de pensiones establecen el derecho de todas las personas mayores, mujeres y hombres, a disfrutar de una pensión de vejez, con independencia de su historial laboral y situación familiar.
El articulo refiere al final que la adopción de estas medidas exigirá un compromiso político y una considerable inversión de recursos. Pero seamos claros: la alternativa no puede ser nunca delegar el trabajo de cuidados no remunerado en las mujeres para abandonarlas a la pobreza cuando llegan a la vejez.
Si es de su interés, pueden consultar el articulo entero en las siguiente dirección: http://www.unwomen.org/es/news/stories/2015/9/experts-take-old-age-a-double-whammy-for-women#sthash.Ff8a5fRY.dpuf
