Mientras que hace unas décadas estaba presente en hasta 15 estados de la República Mexicana, actualmente sólo cinco entidades cuentan con poblaciones reproductivas y estables.
El oso negro disminuyó drásticamente su distribución; mientras que hace unas décadas estaba presente en hasta 15 estados de la República Mexicana, actualmente sólo cinco entidades cuentan con poblaciones reproductivas y estables, aseveró en la Universidad Autónoma del Estado de México, el especialista Rogelio Carrera Treviño.
Durante su participación en el Simposio Internacional "Biología de la conservación: Grandes depredadores en México", organizado por el Centro de Investigación en Ciencias Biológicas Aplicadas (CICBA) de la UAEM, en coordinación con la Comisión Estatal de Parques Naturales y de la Fauna (CEPANAF) y el Consejo Mexiquense de Ciencia y Tecnología (COMECyT), el experto habló sobre "Manejo y conservación del Oso Negro en México".
El profesor de la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia de la Universidad Autónoma de Nuevo León destacó que se desconoce y falta información sobre la situación de las poblaciones de osos en el país; lo cierto, dijo, es que esta especie sólo prevalece en los estados de Sonora, Chihuahua, Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas.
En el Centro Cultural Universitario "Casa de las Diligencias", donde se llevaron a cabo las actividades de este ejercicio académico, subrayó que la principal amenaza para los osos negros es su eliminación, en represalia por ataques a animales domésticos y por ser considerado uno de los carnívoros más grandes que ocasionalmente, puede matar ganado, principalmente crías.
Afirmó que el oso puede a llegar a causar daños en la agricultura y los cultivos, pues 80 por ciento de la dieta natural del oso se basa en el consumo de vegetales y el resto, de carne; sin embargo, con este mínimo porcentaje, los osos llegan a cazar vacas, cabras y borregos.
Rogelio Carrera Treviño enfatizó que el oso negro también come frutos y es un dispersor de semillas muy importante; incluso, existen estudios de cómo los osos tienen una participación importante en la reproducción de ciertas especies que ayudan a regenerar el bosque y son parte fundamental en ellos.
Durante su participación en el Simposio Internacional "Biología de la conservación: Grandes depredadores en México", organizado por el Centro de Investigación en Ciencias Biológicas Aplicadas (CICBA) de la UAEM, en coordinación con la Comisión Estatal de Parques Naturales y de la Fauna (CEPANAF) y el Consejo Mexiquense de Ciencia y Tecnología (COMECyT), el experto habló sobre "Manejo y conservación del Oso Negro en México".
El profesor de la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia de la Universidad Autónoma de Nuevo León destacó que se desconoce y falta información sobre la situación de las poblaciones de osos en el país; lo cierto, dijo, es que esta especie sólo prevalece en los estados de Sonora, Chihuahua, Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas.
En el Centro Cultural Universitario "Casa de las Diligencias", donde se llevaron a cabo las actividades de este ejercicio académico, subrayó que la principal amenaza para los osos negros es su eliminación, en represalia por ataques a animales domésticos y por ser considerado uno de los carnívoros más grandes que ocasionalmente, puede matar ganado, principalmente crías.
Afirmó que el oso puede a llegar a causar daños en la agricultura y los cultivos, pues 80 por ciento de la dieta natural del oso se basa en el consumo de vegetales y el resto, de carne; sin embargo, con este mínimo porcentaje, los osos llegan a cazar vacas, cabras y borregos.
Rogelio Carrera Treviño enfatizó que el oso negro también come frutos y es un dispersor de semillas muy importante; incluso, existen estudios de cómo los osos tienen una participación importante en la reproducción de ciertas especies que ayudan a regenerar el bosque y son parte fundamental en ellos.
