México exige de la nueva titular de la SEP, ser muy certera y eficaz en la atención al rezago evidenciado en aprendizaje de hasta dos años en áreas como la lectoescritura, o las matemáticas, y la consecuente deserción escolar de miles de alumnos. Asimismo tendrá que resolver los subejercicios, las polémicas y vacíos generados por ejemplo en el programa “La escuela es nuestra” y sobre todo el debate abierto por el plan educativo piloto recién presentado donde apuesta por el aprendizaje por proyectos y se organiza en siete ejes donde aseguran se intentará conectar los contenidos de distintas disciplinas con la realidad y que los alumnos se formen como ciudadanos de una sociedad democrática, pero ya hay expresiones de preocupación por una excesiva ideologización e incluso posible adoctrinamiento de los estudiantes. ¿Lo resolverá?

Es probable que -siendo de todas las confianzas del Presidente- la nueva titular de la SEP rechace los diversos comentarios escépticos y propositivos que no aplaudan lo ya hecho por la 4-T, eso sería previsible, pero ojalá intente dejar huella aprovechando la gran oportunidad que le han dado, para mostrarse superior a lo esperado y cerrar notablemente esta gestión en materia educativa, Se está necesitando