Destacan las Cuevas de la Amistad y los Centros Recreativos “El Zoológico” y “Los Cipreses”.
Recomiendan de su gastronomía por el pepeto, platillo elaborado artesanalmente.
Recomiendan de su gastronomía por el pepeto, platillo elaborado artesanalmente.
El municipio de Acolman se convirtió en un pueblo con encanto gracias a su riqueza histórica, cultural y natural, ubicado en la zona norte-centro del Edoméx, invita a conocer sus atractivos y obtener una experiencia única.
Su nombre tiene origen en el náhuatl, de ocumáitl, aculli, “hombre” y máitl, “mano” o “brazo”, lo que significa “Hombre con mano o brazo”. Es un municipio integrante de la Zona Metropolitana del Valle de México, que colinda con Tecámac, Teotihuacán, Tepetlaoxtoc, Chiautla, Tezoyuca, Atenco y Ecatepec.
De todos sus atractivos turísticos resaltan el templo y Ex Convento de San Agustín, considerado como una de las joyas arquitectónicas y religiosas más notable del Siglo XVI, y su fachada da muestra representativa del arte plateresco. En 1993 fue declarado Monumento Nacional y actualmente alberga el Museo Virreinal.
Para disfrutar de su riqueza natural pueden visitar las Cuevas de la Amistad, y en los Centros Recreativos “El Zoológico” y “Los Cipreses”.
Para llevar un recuerdo a casa, puedes adquirir alguna de sus artesanías, como los gabanes y sarapes de lana o de fibra acrílica o figuras de jade, ónix y obsidiana.
Puedes conocer a fondo la tradición de la cuna de las piñatas que se origina hace 420 años como aporte de los misioneres agustinos.
Durante diciembre, se realiza la Feria de la Piñata, en la que habitantes de varias comunidades elaboran sus propios diseños y se premia a la más grande y original.
Para degustar sus deliciosos platillos, ofrece los de la región como mixiotes, barbacoa, mole de guajolote, tlacoyos y su especialidad llamada pepeto, que se elabora con carne de cerdo, chilacayotes, granos de elote, habas, cebollas, epazote y chile manzano.
Este Pueblo con Encanto espera a sus visitantes, con todas las medidas de seguridad sanitarias para prevenir el contagio del virus SARS-CoV-2, como son uso de cubrebocas, aplicación de gel antibacterial y la sana distancia.
Su nombre tiene origen en el náhuatl, de ocumáitl, aculli, “hombre” y máitl, “mano” o “brazo”, lo que significa “Hombre con mano o brazo”. Es un municipio integrante de la Zona Metropolitana del Valle de México, que colinda con Tecámac, Teotihuacán, Tepetlaoxtoc, Chiautla, Tezoyuca, Atenco y Ecatepec.
De todos sus atractivos turísticos resaltan el templo y Ex Convento de San Agustín, considerado como una de las joyas arquitectónicas y religiosas más notable del Siglo XVI, y su fachada da muestra representativa del arte plateresco. En 1993 fue declarado Monumento Nacional y actualmente alberga el Museo Virreinal.
Para disfrutar de su riqueza natural pueden visitar las Cuevas de la Amistad, y en los Centros Recreativos “El Zoológico” y “Los Cipreses”.
Para llevar un recuerdo a casa, puedes adquirir alguna de sus artesanías, como los gabanes y sarapes de lana o de fibra acrílica o figuras de jade, ónix y obsidiana.
Puedes conocer a fondo la tradición de la cuna de las piñatas que se origina hace 420 años como aporte de los misioneres agustinos.
Durante diciembre, se realiza la Feria de la Piñata, en la que habitantes de varias comunidades elaboran sus propios diseños y se premia a la más grande y original.
Para degustar sus deliciosos platillos, ofrece los de la región como mixiotes, barbacoa, mole de guajolote, tlacoyos y su especialidad llamada pepeto, que se elabora con carne de cerdo, chilacayotes, granos de elote, habas, cebollas, epazote y chile manzano.
Este Pueblo con Encanto espera a sus visitantes, con todas las medidas de seguridad sanitarias para prevenir el contagio del virus SARS-CoV-2, como son uso de cubrebocas, aplicación de gel antibacterial y la sana distancia.
