La campaña fue desarrollada gracias a la participación de más de 200 mujeres y hombres de las comunidades y de autoridades que compartieron sus experiencias de vida.
El Representante de UNODC en México, el Sr. Kristian Hölge, resaltó que: "La Campaña Corazón Azul contra la trata de personas en comunidades indígenas de México es la voz misma de mujeres y hombres indígenas, de la sociedad civil, de las autoridades y de nuestros operadores y operadoras de justicia. Es un símbolo de unión para contribuir a identificar los factores de riesgo y generar conciencia".
Durante el lanzamiento estuvo presente la Secretaría de Relaciones Exteriores, las Casas de la Mujer Indígena: Ve’e Naxihi de San Quintín, Baja California; Yoltika A.C. de Tlaola, Puebla; y Kinchik’kan de Papantla, Veracruz. Participaron asimismo la Asociación Menchú Tum; el Consejo Ciudadano y la Comisión Intersecretarial para Prevenir, Sancionar y Erradicar los Delitos en Materia de Trata de Personas y para la Protección y Asistencia a las Víctimas de estos Delito.
Se presentaron una serie de materiales, los cuales incluyen spots de radio y televisión, animaciones, historietas y juegos de mesa que serán distribuidos en las comunidades indígenas para fomentar el aprendizaje y reconocimiento del delito de la trata de personas. Dichos materiales fueron traducidos al mixteco alto, al náhuatl y al totonaco con el objetivo de proporcionar herramientas que correspondan a los contextos diferenciados de Baja California, Puebla y Veracruz desde una perspectiva de género, derechos humanos e interculturalidad.
Asimismo, se realizó la "Mesa de intercambio de buenas prácticas en materia de prevención y asistencia a casos de trata de personas" entre las tres Casas de las Mujer Indígena y las organizaciones indígenas canadienses Tungasuvvingat Inuit, Ma Mawi Wi Chi Itata y Ontario Native Women’s Association.
Estas actividades se enmarcan en el proyecto "Detección y Prevención de la trata de personas en comunidades indígenas de México", que comenzó en 2018 y busca fortalecer los lazos de cooperación entre las autoridades y las comunidades indígenas para dotar de herramientas técnicas que contribuyan a reducir la incidencia de este delito.
En línea con la Agenda 2030, UNODC reitera su compromiso para continuar trabajando en favor de las y los sobrevivientes de la trata de personas y crear espacios de diálogo que contribuyan al intercambio de buenas prácticas, lecciones aprendidas y retos que sirvan para la reflexión conjunta.
Finalmente, la Oficina dio las gracias a los medios de comunicación que han amplificado las voces de las personas sobrevivientes de trata y han apoyado la difusión de la campaña Corazón Azul. Los materiales estarán disponibles en el sitio www.aqui-estoy.org.