Veintiún hombres y dos mujeres fueron reportados desaparecidos de febrero a mediados de mayo, según el alto comisionado para los Derechos Humanos de la organización, Zeid Ra’ad al Hussein, con altos indicios de participación de funcionarios federales en los crímenes. Organizaciones locales de derechos humanos han documentado hasta cuarenta casos en el mismo periodo. Familiares de las víctimas han realizado protestas en las que han señalado directamente la participación de elementos de la Secretaría de Marina en las desapariciones.
La CNDH señaló que a partir de esta noticia, se ha buscado desprestigiar la labor de Raymundo Ramos, director del Comité de Derechos Humanos de Nuevo Laredo y acompañante de algunas de las familias denunciantes. El más reciente episodio se dio apenas tres días, cuando el Ejército presuntamente incautó armas y pancartas de protesta contra los marinos; sin embargo, Amnistía Internacional aclaró que éstas no son como las que utilizan los familiares.
Para la CNDH, estos ataques buscan asociar la labor de defensa de derechos humanos de las víctimas y sus familiares con la protección de delincuentes, o en algunos casos señalando directamente a los defensores como criminales o con acusaciones de tener vínculos con la delincuencia organizada.