ALERTA CON LAS ENAJENACIONES DE BIENES MUNICIPALES
Casi pasó desapercibido que recientemente la legislatura del estado autorizó al Ayuntamiento de Coacalco la venta de tres predios a través de subasta, con la cual buscan obtener recursos para pagar deudas y cubrir laudos laborales por varios millones de pesos, ​ que acechan sus finanzas.
Lo riesgoso de esta autorización, es que se convierta en el camino a seguir para muchos alcaldes que busquen obtener recursos, cuando ya no se pueden endeudar porque deben hasta la camisa, y entonces les dé por rematar el patrimonio municipal antes que acentuar la disciplina financiera, austeridad y eficiencia recaudadora para cumplir con su deber.
La Legislatura debe ser muy exigente y mostrar que se asegura a través del OSFEM y de todos los instrumentos aplicables, qué antes de autorizar vender inmuebles municipales se hace el máximo esfuerzo administrativo y también vigila el manejo legal e impecable de los remates, donde los recursos que generen realmente servirán para disminuir o liquidar las deudas, y no al paso de tiempo vuelvan a salir con las mismas cuentas.
Ya es sabido que varios ediles ven las enajenaciones como puerta de salvación a sus crisis, pero antes deberían garantizar los municipios que las subastas se efectúen con toda la publicidad y transparencia, mientras los ciudadanos y organizaciones civiles tendrán que mantenerse muy atentos a que se cumpla la Ley de Contratación Pública del Estado, que los avalúos de los bienes sea el correcto y que los remanentes cuando los hubiera, sean de real impacto en los servicios públicos municipales.
Ojalá que no tengamos que recordar a los legisladores ni a los presidentes municipales que autorizan esto, por las mermas patrimoniales más que por el alivio de la finanzas de los municipios ahorcados, ojalá que no se generen nuevos ricos al estilo de un tal Borge. ¡Mucho cuidado señoras y señores!
Estamos en comunicación.
*Columna publicada en Milenio Estado de México
@oscarglenn
Casi pasó desapercibido que recientemente la legislatura del estado autorizó al Ayuntamiento de Coacalco la venta de tres predios a través de subasta, con la cual buscan obtener recursos para pagar deudas y cubrir laudos laborales por varios millones de pesos, ​ que acechan sus finanzas.
Lo riesgoso de esta autorización, es que se convierta en el camino a seguir para muchos alcaldes que busquen obtener recursos, cuando ya no se pueden endeudar porque deben hasta la camisa, y entonces les dé por rematar el patrimonio municipal antes que acentuar la disciplina financiera, austeridad y eficiencia recaudadora para cumplir con su deber.
La Legislatura debe ser muy exigente y mostrar que se asegura a través del OSFEM y de todos los instrumentos aplicables, qué antes de autorizar vender inmuebles municipales se hace el máximo esfuerzo administrativo y también vigila el manejo legal e impecable de los remates, donde los recursos que generen realmente servirán para disminuir o liquidar las deudas, y no al paso de tiempo vuelvan a salir con las mismas cuentas.
Ya es sabido que varios ediles ven las enajenaciones como puerta de salvación a sus crisis, pero antes deberían garantizar los municipios que las subastas se efectúen con toda la publicidad y transparencia, mientras los ciudadanos y organizaciones civiles tendrán que mantenerse muy atentos a que se cumpla la Ley de Contratación Pública del Estado, que los avalúos de los bienes sea el correcto y que los remanentes cuando los hubiera, sean de real impacto en los servicios públicos municipales.
Ojalá que no tengamos que recordar a los legisladores ni a los presidentes municipales que autorizan esto, por las mermas patrimoniales más que por el alivio de la finanzas de los municipios ahorcados, ojalá que no se generen nuevos ricos al estilo de un tal Borge. ¡Mucho cuidado señoras y señores!
Estamos en comunicación.
*Columna publicada en Milenio Estado de México
@oscarglenn
