Se acerca el momento de la rendición de cuentas del primer año de Alfredo del Mazo como gobernador, agotado el modelo del besamanos como del talk show usado por sus antecesores, con una legislatura recién renovada y dominada por MORENA, sería un buen momento quizá para acudir al poder Legislativo a mostrar y defender sus resultados con argumentos, dejando ver también de una vez qué clase de dialogo pueden sostener estos dos poderes y hasta donde cada uno estará la dispuesto a convivir el próximo trienio asumiendo su responsabilidad y dejando atrás la competencia política. ¿es mucho pedir?