Con lo que se sabe hasta ahora del Proyecto de Presupuesto 2020 aprobado recientemente en la Cámara de Diputados Federal, hay motivos de esperanza, decepción y apuesta a la suerte para diferentes instituciones y sectores sociales, que quisieran encontrar en él las claves para enfrentar con mejor perspectiva muchos de sus problemas en el año próximo, sin estar sujetos a la discrecionalidad de los que toman decisiones.
Por una parte, el Secretario de Hacienda se muestra optimista porque con este proyecto se tengan importantes niveles de recaudación con el nuevo esquema que están implementando y así se dé viabilidad a los diversos programas sociales que son la prioridad del Presidente de México. Asegura también que han considerado la mayor parte de las inquietudes de la iniciativa privada como para que todo salga de manera aceptable en esta transformación. Primero lo primero, ya sabemos. Ojalá.
Tema para la expectación, es la presupuestación de 452 mil millones de pesos para Programas sociales que el CONEVAL ha calificado de bajo impacto en el combate a la pobreza, tal como lo ha consignado el Reforma este inicio de semana, por lo que tendrán un año y muchos billetes para demostrar que tienen razón; aunque el Consejo al igual que ese diario "gozan" de la antipatía del mandatario por querer ponerle referentes y opinar sobre su desempeño -y ya además de descalificarlos les ha presagiado un mal futuro a ambos- esperamos que ambos subsistan por su valía natural.
Por otra parte, durante el primer año del Gobierno de la 4-T ha quedado claro que más allá del combate a la corrupción que es su bandera, el problema de la inseguridad y la delincuencia de todo tipo, son la mayor preocupación de la sociedad, por ello a querer o no algunos mandatarios han externado su respaldo a la estrategia de seguridad del Presidente que tiene en la Guardia Nacional su gran apuesta.
Todos los recursos destinados a esta nueva corporación deberán alcanzar para consolidarla y subsanar adecuadamente las carencias de las corporaciones locales, tanto estatales, como municipales, a las que han ignorado y de fortalecerlas como sería necesario ni se habla, asi que no les otorgarán en 2020 un aumento más allá del porcentaje de la inflación en sus gastos de operación y a algunos de plano una reducción que les resulta inexplicable. Ojalá que alcance.
Donde sí les han tirado un verdadero salvavidas financiero a los estados y municipios es en la previsión para que la CFE implemente un programa de regularización de cartera vencida, que permita a las entidades y organismos operadores de agua y saneamiento, establezcan convenios para pagar en facilidades los adeudos pendientes y en el mejor de los casos obtengan condonaciones significativas. Ojala que los que hoy elaboran presupuestos locales vayan preparando su propuesta para presentarla antes de que concluya el mes de febrero o se les ira otro tren.
De todo esto sólo faltará lo que los Senadores de la República tengan a bien enmendar o adicionar, aunque parece que no será mucho, ojalá reduzcan la discrecionalidad que por ahí subsiste, ya seria buen aporte.
Por una parte, el Secretario de Hacienda se muestra optimista porque con este proyecto se tengan importantes niveles de recaudación con el nuevo esquema que están implementando y así se dé viabilidad a los diversos programas sociales que son la prioridad del Presidente de México. Asegura también que han considerado la mayor parte de las inquietudes de la iniciativa privada como para que todo salga de manera aceptable en esta transformación. Primero lo primero, ya sabemos. Ojalá.
Tema para la expectación, es la presupuestación de 452 mil millones de pesos para Programas sociales que el CONEVAL ha calificado de bajo impacto en el combate a la pobreza, tal como lo ha consignado el Reforma este inicio de semana, por lo que tendrán un año y muchos billetes para demostrar que tienen razón; aunque el Consejo al igual que ese diario "gozan" de la antipatía del mandatario por querer ponerle referentes y opinar sobre su desempeño -y ya además de descalificarlos les ha presagiado un mal futuro a ambos- esperamos que ambos subsistan por su valía natural.
Por otra parte, durante el primer año del Gobierno de la 4-T ha quedado claro que más allá del combate a la corrupción que es su bandera, el problema de la inseguridad y la delincuencia de todo tipo, son la mayor preocupación de la sociedad, por ello a querer o no algunos mandatarios han externado su respaldo a la estrategia de seguridad del Presidente que tiene en la Guardia Nacional su gran apuesta.
Todos los recursos destinados a esta nueva corporación deberán alcanzar para consolidarla y subsanar adecuadamente las carencias de las corporaciones locales, tanto estatales, como municipales, a las que han ignorado y de fortalecerlas como sería necesario ni se habla, asi que no les otorgarán en 2020 un aumento más allá del porcentaje de la inflación en sus gastos de operación y a algunos de plano una reducción que les resulta inexplicable. Ojalá que alcance.
Donde sí les han tirado un verdadero salvavidas financiero a los estados y municipios es en la previsión para que la CFE implemente un programa de regularización de cartera vencida, que permita a las entidades y organismos operadores de agua y saneamiento, establezcan convenios para pagar en facilidades los adeudos pendientes y en el mejor de los casos obtengan condonaciones significativas. Ojala que los que hoy elaboran presupuestos locales vayan preparando su propuesta para presentarla antes de que concluya el mes de febrero o se les ira otro tren.
De todo esto sólo faltará lo que los Senadores de la República tengan a bien enmendar o adicionar, aunque parece que no será mucho, ojalá reduzcan la discrecionalidad que por ahí subsiste, ya seria buen aporte.
