Lozoya, y todo por el petróleo

Raúl Mandujano

Lozoya, y todo por el petróleo

Mire Usted, le voy a platicar una historia, es de por allá de enero de 1989, hace unos 30 años. Allá en Tampico, en las oficinas del sindicato de PEMEX, gente de los líderes petroleros Joaquín Hernández Galicia, apodado "La Quina" y Salvador Barragán Camacho, al que le decían "El Campeón de la Lealtad", escondían todo, pruebas, documentos, luego de que fueran detenidos sus jefes acusados por el gobierno de Carlos Salinas de Gortari, entre otros delitos, por desfalcos superiores a los 3 mil millones de dólares. Así comenzaba su mandato el otrora celebre Salinas de Gortari.

Les hablo de una suma inconmensurable. Ahora bien, los que saben dicen que otro implicado en los desfalcos contra PEMEX es Carlos Romero Deschamps, el hoy dirigente del gremio petrolero ha amasado una fortuna superior a los mil millones de pesos entre residencias de lujo, un yate, departamentos en Estados Unidos y automóviles de lujo y de marcas como Ferrari. Por ejemplo, en el libro "Los demonios del sindicalismo mexicano", su autor, Martín Moreno lo señala como "el líder sindical más poderoso. Dice que "es incalculable la fortuna que ha recibido el sindicato petrolero por parte de Pemex y los gobiernos en turno, es algo que es un agravio para los mexicanos, es una cifra insultante".

Hoy estamos nuevamente ante otro caso de corrupción en PEMEX. El gobierno de Andrés Manuel López Obrador da su propio golpe mediático al anunciar una orden de aprehensión en contra del ex director de Petróleos Mexicanos, Emilio Lozoya, amigo, brother del ex presidente Enrique Peña Nieto, al estar vinculado, Lozoya, a sobornos con la empresa Oldebrech, por montos superiores a los 10 millones de dólares, por la entrega de contratos en refinerías mexicanas por sumas cercanas a los cien mil millones de dólares.

Y mire, al final de cuentas, me queda muy claro que tanto el mugroso asaltante de pasajeros, y el perfumado político de cuello blanco de Pemex, o sus líderes sindicales, son igual de ladrones. Pobre México, tan lejos de Dios y tan cerca de sus políticos… En fin. Mi twiter @raulmanduj