Inevitable fue generar cierto optimismo tras la reunión sostenida el pasado 14 de mayo entre el Rector de la UAEM, Alfredo Barrera Baca y su equipo, con los Diputados Locales integrantes de la Diputación Permanente de la 60 Legislatura, para exponer los fundamentos de la iniciativa de reforma a la Ley de la Universidad Autónoma del Estado de México, elaborada por la máxima casa de estudios y que fue presentada por el titular Gobernador Del Mazo.
La propuesta ya está en las comisiones de Gobernación y Puntos Constitucionales y de Educación, Cultura, Ciencia y Tecnología, y si incluye la polémica idea de ratificación en el cargo del rector y de los directores de organismos académicos, pero especificando que si se aprobara no sería aplicable a quienes ostenten la titularidad de los cargos antes de la fecha de entrada en vigor la reforma.
Otras propuestas que en su momento fueron avaladas por la comunidad universitaria, como la indispensable sanción a los servidores públicos universitarios que no cumplan con sus obligaciones, a cargo de la Contraloría Universitaria, así como el seguimiento y evaluación de la gestión presupuestal, patrimonial y administrativa de la Universidad, también se incluyeron.
Aspectos trascendentes como la autogeneración de recursos derivados de proyectos de investigación científica y de desarrollo tecnológico o el impulso a la vinculación internacional e intercultural de la enseñanza colaborando con instituciones extranjeras, la doble titulación y el fortalecimiento de los intercambios académicos y científicos, pueden florecer en este proceso.
Si tal como lo han expresado, tanto la Rectoría de la Máxima Casa de Estudios del Estado como los legisladores, se disponen a analizar con serenidad y visión, con datos y elementos técnicos suficientes la viabilidad así como el alcance de los diferentes rubros que componen la iniciativa universitaria, e igualmente valoran otras propuestas, algo bueno tiene que venir para la Universidad.
El Rector Alfredo Barrera ha ofrecido total disposición para para construir con la Legislatura una reforma que actualice y transparente los procedimientos internos para consolidar el liderazgo de la institución, mientras el diputado presidente de la Junta de Coordinación Política, Maurilio Hernández González, ratifica convicción de legislar con responsabilidad, objetividad y respeto a la comunidad universitaria.
¡Empieza lo bueno! Ojalá que esa civilidad fructifique y sirva además para poner en perspectiva lo que se requiere en el Estado, para garantizar el acceso a la educación superior. Ojalá también, que no sancionen por condescendientes a los legisladores del partido Morena.
La propuesta ya está en las comisiones de Gobernación y Puntos Constitucionales y de Educación, Cultura, Ciencia y Tecnología, y si incluye la polémica idea de ratificación en el cargo del rector y de los directores de organismos académicos, pero especificando que si se aprobara no sería aplicable a quienes ostenten la titularidad de los cargos antes de la fecha de entrada en vigor la reforma.
Otras propuestas que en su momento fueron avaladas por la comunidad universitaria, como la indispensable sanción a los servidores públicos universitarios que no cumplan con sus obligaciones, a cargo de la Contraloría Universitaria, así como el seguimiento y evaluación de la gestión presupuestal, patrimonial y administrativa de la Universidad, también se incluyeron.
Aspectos trascendentes como la autogeneración de recursos derivados de proyectos de investigación científica y de desarrollo tecnológico o el impulso a la vinculación internacional e intercultural de la enseñanza colaborando con instituciones extranjeras, la doble titulación y el fortalecimiento de los intercambios académicos y científicos, pueden florecer en este proceso.
Si tal como lo han expresado, tanto la Rectoría de la Máxima Casa de Estudios del Estado como los legisladores, se disponen a analizar con serenidad y visión, con datos y elementos técnicos suficientes la viabilidad así como el alcance de los diferentes rubros que componen la iniciativa universitaria, e igualmente valoran otras propuestas, algo bueno tiene que venir para la Universidad.
El Rector Alfredo Barrera ha ofrecido total disposición para para construir con la Legislatura una reforma que actualice y transparente los procedimientos internos para consolidar el liderazgo de la institución, mientras el diputado presidente de la Junta de Coordinación Política, Maurilio Hernández González, ratifica convicción de legislar con responsabilidad, objetividad y respeto a la comunidad universitaria.
¡Empieza lo bueno! Ojalá que esa civilidad fructifique y sirva además para poner en perspectiva lo que se requiere en el Estado, para garantizar el acceso a la educación superior. Ojalá también, que no sancionen por condescendientes a los legisladores del partido Morena.
