Opiniones

Analizando rio 2016

Analizando rio 2016

Por Jorge Carrión

Valdría la pena hacer una pequeña reflexión sobre los motivos y causales que han originado la penosa y triste participación de la delegación mexicana en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro, en Brasil.

Dejando de lado el aspecto deportivo, habrá que señalar a los presuntos responsables de tan lamentable ventaneada a nivel internacional, a los primeros que habría que llamar a rendir cuentas y poner en orden es a los presidentes de las distintas federaciones deportivas, que ante todo anteponen su interés personal por encima de los verdaderos intereses deportivos, tienen y han tenido secuestradas a las distintas disciplinas que representan o se dicen representar. Secuestro que inhibe y detiene los apoyos logísticos, económicos y deportivos de los atletas de alto rendimiento.

En segundo término, además de rendir cuentas a la ciudadanía y por dignidad humana y personal debería de dirimir del cargo, el todólogo e ilustre titular de la Comisión Nacional del Deporte Alfredo Castillo, ya ve usted que dícese conocedor de temas relacionados con la procuración de justicia, con la mediación de los grupos del crimen organizado y desorganizados y desde luego de toda la gama deportiva desde la trinchera directiva. Pero si hacemos una rápida reflexión nos daremos cuenta que en las dos primeras tareas no entregó buenas cuentas, por qué habría de hacerlo en el rubro deportivo de alto rendimiento.

Sin afán de pretender justificar el trabajo de nadie, esta crónica de una muerte anunciada, era ya eso, una crónica anunciada, fundamentalmente porque no existe una política gubernamental de mediano o largo plazo de empoderamiento del deporte de alto rendimiento, porque los recursos destinados para estos fines solo fluyen en la antesala de una justa de esta naturaleza y a cuenta gotas, de no ser por el patrocinio comercial, algunos deportistas hubiesen fracasado ya con mucha antelación.

Un elemento más de este fracaso lo encabezan sin lugar dudas las televisoras, construyendo figuras donde no las hay, o en su defecto arengando disciplinas donde otros países son verdaderas potencias. Y como cereza del pastel, también creo que tiene un impacto psicológico en los deportistas el hecho de que el país este patas para arriba, que se tienen muchos frentes abiertos, bajo la lógica de que si está mal la cabeza, porqué razón no deberían estar mal las otras extremidades del cuerpo, al final del día creo yo, todo suma, unos más culpables que otros, pero todos han abonado al aniquilamiento del único distractor social que creíamos capaz de mitigar tanto encono social.